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Cuando nuestro bebé se enfrenta a una serie de patologías respiratorias, como bronquiolitis, resfriados de vías altas, laringitis, asma u otitis, puede ser complicado verlos incómodos y no siempre sabemos cómo actuar. En estos casos, la fisioterapia respiratoria para bebés es una solución increíblemente útil, segura y eficaz. Desde Maternify, a continuación, te explicamos qué es, en qué consiste y cuáles son las principales técnicas utilizadas para ayudar a los pequeños a respirar mejor.
La fisioterapia respiratoria es una especialidad dentro de la fisioterapia que se centra en ayudar a los bebés y niños a mejorar su función respiratoria. Mediante una serie de técnicas específicas, el objetivo principal es eliminar las secreciones en las vías respiratorias, mejorar la función pulmonar y aliviar los síntomas comunes derivados de posibles problemas respiratorios.
Este tipo de terapia es completamente segura y se realiza en sesiones personalizadas, adaptadas a las necesidades y edad del bebé. Además, está diseñada para ser indolora y lo menos invasiva posible. Los resultados son casi inmediatos, ya que tiende a disminuir las recaídas y el uso de la medicación.
En el campo de la fisioterapia respiratoria existen varias técnicas utilizadas para ayudar a limpiar las vías respiratorias de los bebés. A continuación, te presentamos algunas de más comunes, que siempre deben ser realizadas por los profesionales en el área:
Que un bebé aprenda a toser es una habilidad clave, ya que les permite despejar las vías respiratorias. En estas sesiones de fisioterapia respiratoria se enseña al pequeño a que éste sea capaz de generar el reflejo de la tos, ya que en la mayoría de los casos aún no lo han desarrollado de un modo correcto. En este aspecto, el fisioterapeuta ayuda a iniciar una tos espontánea, que permita expulsar cualquier tipo de secreción. Educa al pequeño a toser.
El método de la tos provocada en bebés también tiene la función de ayudarles a expulsar las secreciones acumuladas en las vías respiratorias. Este tipo de técnica, suave y sin dolor, suele emplearse cuando hay una acumulación del moco en los bronquios o en la garganta. El fisioterapeuta tiende a realizar una ligera presión en la zona del tórax del pequeño, justo en el momento de la exhalación, buscando así el reflejo de la tos. Es cuando el bebé toserá de manera voluntaria y segura.
La DRR suele ser utilizada para eliminar aquellas secreciones acumuladas especialmente en la rinofaringe. La técnica aprovecha el reflejo inspiratorio natural que sigue a una espiración forzada o a un momento de llanto, y se enfoca en limpiar la zona de la nariz y faringe para mejorar la respiración y reducir la congestión.
En esta técnica, el fisioterapeuta realiza una maniobra en la que presiona suavemente la boca del niño al final de la espiración, elevando la mandíbula. En algunos casos, se puede aplicar suero fisiológico en la nariz para facilitar el proceso y mejorar la eficacia de la limpieza.
Esta técnica combina la desobstrucción rinofaríngea retrógrada (DRR) con la aplicación de una ducha nasal. Ésta última consiste en aplicar una solución salina en la nariz del bebé, lo que ayuda a diluir y aflojar las secreciones, haciéndolas más fáciles de eliminar. Es un método especialmente útil en casos de rinitis o alergias, ayudando a mantener limpias las vías nasales del bebé.
En esta ocasión, el bombeo traqueal espiratorio se basa en movilizar y eliminar las secreciones acumuladas en las vías respiratorias. Esta técnica consiste en un masaje suave que se aplica en el cuello, que está ligeramente extendido, mientras el bebé -colocado boca arriba- exhala. El fin con este masaje es arrastrar dichas secreciones, movilizando además el moco que se halla en las vías bajas del sistema respiratorio.
La Técnica Inspiratoria de Presión Oscilatoria, más conocida como TIPO, es un método específico que usa la presión oscilatoria para deshacer las secreciones densas. Con esta técnica, se emplea un dispositivo especial para aplicar pequeñas vibraciones en la caja torácica, que ayudan a disminuir el moco y facilitar su eliminación. La técnica TIPO suele ser recomendada para bebés con secreciones crónicas o fuertes.
La fisioterapia respiratoria en bebés y niños pequeños ofrece una serie de beneficios que pueden mejorar significativamente su calidad de vida, especialmente en épocas donde las enfermedades respiratorias son comunes.
Algunos de los beneficios son: mejora la oxigenación y la capacidad pulmonar; facilita la expulsión de secreciones; reduce el riesgo de infecciones; alivia los síntomas respiratorios y previene las posibles complicaciones o problemas respiratorios a largo plazo.
En Maternify contamos con un equipo de profesionales especializados en fisioterapia respiratoria pediátrica, comprometidos en el cuidado y bienestar de los más pequeños. Sus fisioterapeutas están altamente capacitados para aplicar técnicas seguras y eficaces que ayudan a mejorar la función respiratoria en bebés y niños con patologías respiratorias. Este enfoque integral y especializado nos permite Maternify ofrecer tratamientos personalizados y apoyo constante a todas las familias.
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